Prueba del Skoda Fabia Montecarlo

En esta ocasión, Tested Cars vuelve para mostrarles un modelo que dará mucho que hablar por su aspecto deportivo y a la vez una gran propuesta económica. Predecesor de uno de los modelos más vendidos en sus versiones deportivas y con gran atractivo entre los que buscan deportividad y comodidad. Hablamos del nuevo Skoda Fabia que, junto con el pack Montecarlo, hará  las delicias de todo el que lo conduzca.




Motor del Skoda Fabia Montecarlo


El motor que nos ofrecieron para probar, pertenece a uno de los nuevos introducidos en la gama del utilitario de Skoda. Un motor 1.2 TSI con una potencia máxima homologada de 110 CV encontrando su máximo rendimiento a 4600 rpm. Este motor demuestra una agilidad y eficiencia muy progresivas aunque no por ello lentos. Su consumo y emisiones, que pudimos observar durante nuestra prueba, fueron de  7,0 litros a los 100 km en prueba de carretera y de 5,2 litros a los 100 km en zonas de autopista siendo el consumo mixto calculado de aproximadamente 6 litros a los 100 km.


Este motor posee un bloque de 4 cilindros frontal con tracción delantera y un sistema de inyección directa de alta presión.

Este motor es el superior de gasolina hasta el momento de la gama del nuevo Skoda Fabia a la espera de dos motorizaciones más correspondientes a acabados superiores que aún no han sido presentados.

Prueba de ciudad del Skoda Fabia Montecarlo


La sensación que transmite el Skoda Fabia Montecarlo a través del 1.2 TSI de 110 CV es la de una perfecta simbiosis entre comodidad y deportividad juntas en un mismo motor. Cuando entramos en la cuidad, el Skoda Fabia Montecarlo se comporta de forma sutil y suave, pudiendo pasar de una conducción progresiva y agradable a dar una potencia vibrante es cuestión de segundos para superar obstáculos y pendientes que nos puedan surgir.


En el interior del habitáculo, vibraciones y sonidos son prácticamente imperceptibles con las ventanillas cerradas. La labor de insonorización ha sido llevada a cabo con mimo y dedicación para hacer que ningún ruido nos moleste aun estando en marchas cortas. Si queremos percibir el motor desde el interior del coche será necesario subir las revoluciones por encima de las 3000 rpm, cosa que muy pocas veces será necesario en cuidad.


Gracias al sistema Start&Stop, también evitaremos que nos lleguen las vibraciones del motor cuando estemos detenidos en una retención o cola dentro de la cuidad. Aparte de esto, este sistema tiene como función principal reducir las emisiones y el consumo cuando se trate de circular por la cuidad al detener el coche cada vez que lleguemos a una parada prolongada.


En cuanto a la visibilidad desde el interior del Skoda Fabia Montecarlo, los retrovisores, tanto laterales como interiores, nos dan una vista bastante amplia de lo que sucede a nuestro alrededor. El puesto de conducción no resta visibilidad con respecto a los bajantes de la luna delantera como de los pilares centrales. Como en todos los coches modernos, el frontal del coche queda un poco resignado a la intuición del conductor y a su capacidad para medir las distancias.


Las maniobras dentro de la cuidad se llevan a cabo con gran facilidad gracias a la servodirección electromecánica del Skoda Fabia Montecarlo. Recorrido ligeramente más corto y preciso hace que tomar las curvas sea más fácil para el conductor.


En el apartado de suspensión, el Skoda Fabia Montecarlo presenta una dureza media pero no incomoda que transmita pocas vibraciones al interior del vehículo así como seguridad y poco balanceo a la hora de tomar las curvas. Esto aporta un agarre bastante bueno y sensación de deportividad.


Pero todo esto no podría ser posible sin una buena relación de transmisión. La caja de cambios de 6 velocidades combina capacidad de aceleración en las primeras marchas y suavidad y recorrido justos en las superiores para que circular por cuidad no se convierta en un ejercicio permanente de cambio de marchas. Aparte, los recorridos de la caja entre marcha y marcha son rápidos, precisos y ligeros lo que nos aportara un extra de confort y deportividad.

Algo muy importante a tener en cuenta a la hora de adquirir un utilitario son las medidas. El Skoda Fabia Montecarlo tiene unas dimensiones de cerca de 4 metros de largo por 2 metros de ancho. Bastantes buenas cotas si el vehículo va a estar destinado a la circulación por las grandes ciudades tanto de las islas como de todo el país.


Después de realizar una prueba de 57 kilómetros en el núcleo urbano de la isla, el consumo medio que registraba el ordenador de a bordo del Skoda Fabia era de 7,0 litros por cada 100 kilómetros con una velocidad media de 20 kilómetros por hora durante el trayecto.

Prueba de autopista Skoda Fabia Montecarlo.


En cuanto a la prueba de autopista, el Skoda Fabia Montecarlo ha demostrado un resultado muy bueno. Parte de esto se debe a la seguridad que ofrece, como ya nombramos antes, la dureza media de la suspensión y la precisión de la dirección.


Gracias a sus dimensiones y formas redondeadas hacen que el Skoda Fabia Montecarlo no muestre ningún síntoma de debilidad a la hora de enfrentarse a rachas de viento y su bajo peso, que el fabricante anota en 1150 kilos, hace que la agilidad en las reacciones sea muy satisfactoria.


A la velocidad máxima permitida en nuestras carreteras, el Skoda Fabia Montecarlo muestra estabilidad y aplomo a la hora de coger curvas. La trasmisión de vibraciones al volante es mínimamente perceptible gracias al logrado sistema de suspensión. Tenemos que enfrentarnos a bacheados continuos o uno muy grande para llegar a realmente sentirnos algo incomodos con la suspensión.

En cuanto al confort acústico del Skoda Fabia Montecarlo, con las ventanillas totalmente cerradas, el habitáculo se convierte en un espacio silencioso y hermético, lo que hace que los viajes sean agradables para todos.


Por otro lado, el confort en marcha nos deja una sensación muy agradable gracias a los asientos que, a pesar de tener formas deportivas y una rigidez media, nos hacen sentir que el cuerpo está muy bien sujeto y muy cómodo para realizar grandes desplazamientos.


Con respecto a las pruebas de rendimiento, habituales en nuestras pruebas, el Skoda Fabia Montecarlo con su motor 1.2 TSI ha sacado muy buena nota. En sexta, como cualquier utilitario similar, la reacción no es suficiente como para lograr un arranque seguro para rebasar a otros coches. La quinta sin embargo muestra algo más de reacción para poder afrontar un adelantamiento.  Si lo que buscamos es una reacción más directa, propia para realizar adelantamientos sin ningún tipo de complicación, recurrir a la cuarta es lo más acertado ya que las revoluciones subirán hasta la línea de par optimo registrado es 4600 rpm.


La prueba realizada en la autopista, constó de 115 km en los cuales el ordenador de a bordo del Skoda Fabia Montecarlo registró un consumo medio de 5.2 litros a los 100 kilómetros y una velocidad media de 93 kilómetros por hora.

Visión exterior del  Skoda Fabia Montecarlo


Como viene siendo habitual en los Skoda Fabia, el público al que está destinado este modelo es el joven, aunque el resto también podría sentirse identificado con los que buscan un utilitario con rasgos deportivos que, a pesar de acentuarse con el Pack Montecarlo que probamos, el Skoda Fabia de serie, no deja de ser deportivo a la vez que elegante.


En el Skoda Fabia Montecarlo encontramos un frontal llamativo con unas defensas con aristas pronunciadas y un añadido delantero deportivo pintado en negro brillante.


Junto al capó voluminoso, encontramos una parrilla con bordes negro brillante a juego con los bajos y los faros con fondo negro con luz diurna LED. Encabezando el frontal, el logo renovado que viene siendo habitual desde que se estrenó la línea 2013 de todos los modelos Skoda.


Avanzando por el lateral, el Skoda Fabia Montecarlo no deja de respirar deportividad. Han sabido buscar todo lo necesario para hacer destacar el coche. Cosas como los retrovisores pintados negros brillantes, los añadidos laterales en el mismo color y las llantas de 16" también negro brillante con un borde plateado. Aunque los faros pertenecen a la parte trasera del Skoda, se les ha añadido una línea negra para hacer que el lateral luzca mayor a la vez que más deportivo.


La parte trasera es quizás donde más se notan los cambios que ha sufrido el Skoda Fabia. Los faros cuadrados con la luz de marcha en forma de C, junto con un difusor muy pronunciado también en negro brillante, el alerón de gran dimensión y las líneas en el maletero son muy similares a las que vienen mostrando la línea de Skoda, poniéndole un plus de profundidad a la zona baja del portón.


Visión Interior del Skoda Fabia Montecarlo.



Cuando nos ponemos a los mandos del Skoda Fabia Montecarlo, nos damos cuenta del salto de calidad que ha venido produciéndose en la marca en los últimos años. También hay que decir, que la versión probada no es una versión base, sino el equipamiento más completo de serie del modelo.


Al abrir la puerta del piloto, no podemos evitar fijarnos en los sillones. Estos poseen un acabado rojo con formas ergonómicas y deportivas, siendo los espaldares construidos el respaldo y el cabezal en una sola pieza. Todo ello revestido con tejido rojo, gris y negro para realzar el carácter deportivo.


Si echamos la vista al frente nos encontramos el volante, achatado en la parte inferior y con un tacto superior al tener cuero perforado en las zonas donde más apoyo tienen las manos. Además las costuras en rojo le aportan un plus de deportividad. En los radios laterales tenemos todos los controles necesarios para no tener que retirar la vista de la carretera como los controles de la radio y del ordenador de a bordo.


Detrás del mismo, el cuadro tiene unas líneas simples pero a la vez llamativas. La pantalla central del ordenador de a bordo, es a color y puede configurar muchos parámetros del Skoda Fabia Montecarlo.


La consola central, en su zona más baja, también ha sido dotada de detalles en rojo. El pomo de cambios, así como el del freno de mano, ambos en buena posición y con un manejo excepcional, también son de cuero.


Comenzando por la parte baja de la propia consola nos encontramos con las tomas para conexión de los dispositivos multimedia, ya sea un USB o directamente el teléfono móvil o el reproductor que usemos con un Jack.


Justo por encima, nos encontramos con las manecillas de control del aire acondicionado y sobre estos los botones de desbloqueo, luces de emergencia y la luneta trasera térmica.


En lo alto de la consola central, se encuentra la pantalla del sistema de sonido donde, a parte de poder cambiar las emisoras de la radio y navegar por todas las carpetas de las que dispongamos en un USB con bastante facilidad, también podemos incorporar un teléfono móvil vía bluetooth, controlar el navegador y mirar la disposición del tráfico. También podremos entrar en la pantalla de datos de viaje similar a la del ordenador de a bordo de la pantalla ubicada en el cuadro de mandos para poder ver los consumos o la estimación de kilómetros que nos quedan hasta el repostaje.


El cuadro está acompañado de un guarnecido en formas cubicas grises y negras de carácter deportivo.


Algo atractivo que ofrece el Skoda Fabia Montecarlo es el techo panorámico que, aunque no es practicable, arroja una gran cantidad de luz al interior del vehículo y lo hace parecer mucho mayor,



Los accionadores de los elevalunas y el control de los espejos retrovisores se encuentran en una posición bastante cómoda, cerca de la zona delantera de la puerta. Sólo estirando el brazo, llegamos a accionarlos sin problemas. Una pega respecto a este apartado, es que solo el elevalunas del piloto es automático. El resto hay que mantenerlas para subirlas o bajarlas del todo.

Motorizaciones del Skoda Fabia Montecarlo.


El Skoda Fabia contempla un total de 6 motorización es diferentes. Cuatro motores de gasolina y dos diésel.


Los más básicos de gasolina, con aspiración atmosférica, son 1.0 MPI de 3 cilindros en disposición longitudinal, uno con 60 CV y otro con 75 CV solo estando disponibles con caja de cambios de 5 velocidades. Homologan consumos mixtos de 4,7 y 4,8 litros a los 100 km.

Los siguientes de la lista son los motores turbo 1.2 TSI de 4 cilindros longitudinales, teniendo dos variantes. La primera con 90CV solo disponible con caja de cambios manual de 6 velocidades cuyo consumo máximo homologado por el fabricante viene establecido en 4,7 litros a los 100km.

El más potente de los 1.2 TSI y más potente de la gama, que tuvimos la posibilidad de probar, tiene 110CV y está disponible con caja de cambios manual de 6 velocidades y una DSG de 7 cuyos consumos respectivamente son de 6,1 y 5,8 litros a los 100km.



Los motores diésel son dos motores 1,4 TDI con turbo, 3 cilindros y tecnología CommonRail con 90CV y 140CV cuyos consumos homologados son, de 3,6 litros para ambos motores. El 1.4 TDI de 90 CV también está disponible con caja de cambios DSG de 7 velocidades, en cuyo caso el consumo aumenta hasta los 3,8 litros a los 100km.

TESTED CARS.

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